Pellejo de vino

El pellejo de vino es un término utilizado en el mundo del vino para referirse a la piel de la uva, la cual es una de las partes más importantes en la elaboración de esta bebida.

Esta piel es la encargada de aportar color, sabor y aromas al vino, convirtiéndose en un elemento fundamental en su producción.

La palabra "pellejo" proviene del latín "pelliculus", que significa piel fina, y se refiere específicamente a la capa externa de la uva, la cual está compuesta por células vegetales, agua y azúcares. Esta piel es rica en compuestos fenólicos, como los taninos, que son los responsables de la astringencia y el amargor en un vino.

El pellejo de vino es una de las partes más delicadas de la uva y debe ser tratado con cuidado durante todo el proceso de elaboración del vino.

Su importancia radica en que es la principal fuente de color y sabor en un vino, por lo que su correcto tratamiento es esencial para obtener un producto final de calidad.

El proceso de extracción del pellejo de vino comienza en la vendimia, cuando las uvas son recolectadas y llevadas a la bodega.

Allí, las uvas pasan por una serie de máquinas que las limpian y separan los granos de la piel y las semillas.

Este proceso se conoce como despalillado y es importante para evitar que los taninos de las semillas se transmitan al vino, lo que podría darle un sabor amargo.

Una vez separadas las uvas del pellejo, estas son llevadas a la prensa, donde se les aplica presión para extraer el jugo. Dependiendo del tipo de vino que se esté elaborando, se puede decidir si se prensa la uva con o sin el pellejo.

En el caso de los vinos tintos, el jugo se fermenta junto con la piel para obtener un color más intenso y un mayor contenido de taninos, mientras que en los vinos blancos, el pellejo se elimina antes de la fermentación para obtener un vino más ligero y afrutado.

Durante la fermentación, se produce una maceración en la que los compuestos del pellejo, como los taninos, se disuelven en el jugo y le aportan sabor y color al vino. Dependiendo del tiempo que se deje el pellejo en contacto con el jugo, se obtendrá un vino más o menos tánico. Una vez finalizada la fermentación, el vino es.